Cuando conocemos a una persona por primera vez, inconscientemente analizamos lo que vemos: sus movimientos, su tono de voz, su producción, sus gestos, etc., sin embargo nuestra vista es robada principalmente por lo que llevan puesto. Todos estos conceptos, son lo que nosotros llamamos la primera impresión, un juicio muy por encima del agua conformado por elementos que después se pueden transformar con el paso del tiempo. 

¿Cómo es que definimos nuestro estilo? A través de nuestra imagen personal, un concepto que comunica quiénes somos y cuál es nuestra individualidad; es un conjunto de cómo somos, nuestra manera de portar la ropa, si movemos las manos al hablar o no, cómo y con qué medios nos expresamos, rasgos particulares como la manera en la que decidimos llevar un corte de cabello y claro, nuestra vestimenta, en resumen es la expresión de quienes somos y como lo demostramos ante los demás. 

Es importante que nuestro estilo personal tenga una relación con nuestro interior, siempre de los siempre, así tendremos un distintivo que nos haga únicos, sin embargo también existen grupos con características similares a las nuestras en donde podemos encajar y hoy indagaremos un poco más en dichos grupos. 

Estilo espontáneo

Un grupo que definitivamente está caracterizado por personas que no se centran en un día a día rutinario y que se encuentran constantemente buscando nuevas oportunidades para intentar con diferentes estilos, pueden lucir realmente sencillos un día y destacar perfectamente al día siguiente. Aquí la palabra clave siempre será: creatividad.

Estilo clásico

Definido por ser totalmente conservador, este estilo está dirigido en su mayoría por personas de negocios, apegadas a lo tradicional, aún así, existen variaciones como en la actualidad, donde se mezclan prendas formales –como un traje sastre– con sneakers y accesorios trendy.

Estilo moderno

Muy poco convencional, creativo e imaginativo, el estilo moderno siempre va de la mano con los desfiles más actuales y las tiendas de retail o fast fashion más cercanas. Las personas que evocan por la modernidad siempre están presentes con las tendencias actuales, no tienen miedo de mezclar estilos diferentes a pesar de nunca haberlos intentado antes, estampados, dad sneakers, colores neón, prendas oversized y estilismos excéntricos son un claro ejemplo de los modernos actuales. Las personas de este grupo son originales y no tienen miedo a lo que los demás puedan decir de sus atuendos.

Estilo distinguido

De alto estatuto, refinado y por lo general, con poco nivel de anhelo, una persona con estilo distinguido es identificada por lo impecable que son sus prendas –la mayoría de casas de alta costura–, siempre carentes de colores vivos o texturas muy estampadas y llevando pocos ornamentos en las mismas. Este grupo refleja perfección, es por eso que está polarizado entre la población: quienes lo portan saben que lo hacen bien y los que no ni lo intentan.