Son muchas las canciones donde la escuchamos, infinidad de películas donde la mencionan y cientos de personas quienes la utilizan en su día a día, sin embargo, esta es una palabra que nadie fuera de la comunidad negra debería de utilizar, sí, hoy hablaremos de la “N Word” y por qué no la deberíamos usar en nuestro lenguaje diario, (increíble que tengamos que seguir hablando de esto en pleno 2020 ¿no?).

Al haber crecido en el Valle de Texas la palabra n*gga estaba presente en mi día a día, por una parte mis géneros de música favoritos son el hip-hop y el rap, y por otro lado dicha palabra recorría los pasillos de la escuela como cualquier otra, sin embargo, la realidad es que por más normalizada que este una palabra, esto no borra el contexto y la carga racista detrás de ella. Así es, es difícil olvidar el pasado, por ello basta recordar que en el mundo y principalmente en Estados Unidos, el racismo sistemático ha predominado durante décadas, sin embargo, en la antigüedad dicho racismo y segregación se vivían de forma abierta y totalmente legal, resaltando que la gran mayoría de los ancestros de la comunidad negra vivieron bajo la esclavitud por parte de familias blancas que durante siglos torturaron y oprimieron a familias enteras bajo una idea de superioridad racial, a raíz de esto una de las palabras más utilizadas por parte de la sociedad blanca de Estados Unidos para denigrar a las personas negras, fue la palabra n*gger.

Así es, la “N Word” se convirtió en la principal ofensa hacia la comunidad negra en Estados Unidos, sin embargo, lo que sucedió después fue que dicha comunidad decidió tomar poder de aquella palabra que buscaba reprimirlos, para al contrario cambiar la narrativa detrás de ella y utilizarla como una palabra en la cual encuentran poder, lo cual la convierte en una palabra únicamente permitida para ellxs, quienes vienen de una comunidad que ha sufrido abusos históricos y un racismo que sigue latente hasta la fecha.

Sin embargo, el que la comunidad negra haya decidido tomar la palabra como suya, no significa que aquellos que no somos parte de dicha comunidad podamos usarla, más bien es un recordatorio de la historia de tortura, discriminación y dolor que ha marcado a una comunidad entera, por lo cual debemos de guardar respeto y evitar decirla.

Muchas veces no sabemos lo que hay detrás de ciertas palabras u acciones que han sido normalizadas durante décadas, sin embargo, tenemos la responsabilidad de educarnos en torno a ello y entender que simplemente existen palabras y acciones cuya “normalización” no lo hace correcto, y más bien nos toca corregirlo y enseñar a quienes tenemos en nuestro entorno.