Sigue siendo la década de los años 70, el sentimiento que predomina el ambiente es el hartazgo de la posguerra y del sistema en general. La revolución sexual y el movimiento LGBT se fortalecieron y los ciudadanos de esos años decidieron levantarse y defender sus ideales, en ese escenario mundial: nació el punk a mediados de los años 70s, en Estados Unidos, Gran Bretaña y Australia, con un sonido particularmente fuerte, bajo la influencia de bandas con un rock transgresor como MC5, The Stooges o New York Dolls.
Lo que comenzó como un movimiento estético-musical, más adelante se convertiría en uno estético-filosófico, como respuesta a una sociedad repleta de clichés y estereotipos. Un movimiento que rechaza los dogmas y lo establecido, la moda y la sociedad de masas y que se caracteriza por el concepto de “Hazlo tú mismo”. Así lo explica Greg Graffin, vocalista de Bad Religion en su ensayo “Manifiesto Punk”:
“El Punk es : la expresión personal de la singularidad que proviene de las experiencias de crecer en contacto con nuestra habilidad humana para razonar y plantear preguntas.
El Punk es: un movimiento que sirve para rebatir actitudes sociales que han sido perpetuadas a través de la deliberada ignorancia de la naturaleza humana.
El Punk es: un proceso de cuestionar y de comprometerse a la comprensión, que resulta en el progreso individual, y por redundancia, flores dentro de una evolución social.
El Punk es: la creencia de que este mundo es lo que hacemos de él, la verdad proviene de nuestra comprensión de cómo son las cosas, no del ciego apego a fórmulas acerca de cómo deberían ser.
El Punk es: la lucha constante contra el miedo de las repercusiones sociales.”
Dentro de las diversas corrientes del movimiento se encuentran discursos de Situacionismo, Hardcore, Queer punk, Cyber punk, Straight Edge, Destroy, Anarcopunk, ecologismo, ateísmo y Edupunk.
Además, se dió un movimiento musical feminista que se popularizó en los 90s y que influenció al grunge: Las Riot Grrrls, quienes tomando el concepto de “Hazlo tú mismo” y rechazando la idea de ser groupies o espectadoras en los conciertos, organizaron sus propios eventos, reuniones, exposiciones de arte, fanzines, activismo y militancia política; creando así un sentido de comunidad gracias al underground. Algunas de las bandas más influyentes dentro de este movimiento fueron: Bikini Kill, Bratmobile, Heavens to Betsy, Le Tigre, Boys in Toyland, entre otras.
Las principales bandas de punk fueron: Ramones, Sex Pistols, The Damned, Dead boys, Blondie, The Clash, Misfits, Black Flag quienes en sus letras, expresan su descontento con los sistemas que rigen al mundo y sirven como plataforma de sus propuestas filosóficas e ideologías acompañadas de ritmos y melodías simples pero aceleradas.
En los 80s, en Estados Unidos el género estuvo permeado de contenido político, principalmente progresista. Mientras que en Europa, se utilizó como medio de difusión para movimientos políticos y sociales outsiders, en su mayoría de izquierda.
A principios de los 90s, sus canciones y publicaciones sirvieron como vehículo para planteamientos antiglobalización.
Al igual que la música, la moda se utilizó para alzar la voz, volviéndose agresiva y contestataria migrando visualmente a pantalones ajustados, chaquetas de cuero, zapatos altos, mucho tartán, parches, estoperoles, piercings y a peinados coloridos y extravagantes que desafiaban la gravedad, como: los mohawks y los liberty spikes.
Por sus tintes anarquistas, la “A” se volvió un emblema típico del movimiento. Mismo que se pudo apreciar en la indumentaria y accesorios.
Un referente importante en esta estética se dió en el 430 de King’s Road en Londres, nació Let it Rock, una tienda de moda/instalación creada por Vivienne Westwood y Michael McLaren, lugar que posteriormente cambió su nombre a Too Fast to Live, Too Young to Die (1972), Sex (1974) y Seditionaries (1977).
Dos piezas icónicas creadas por Westwood fueron los drainpipe pants, jeans ultra ajustados como una contrapropuesta para los pantalones acampanados y los bondage pants, elaborados en tartán y parches de cuero.
“Los punks rechazaron lo estéticamente agradable y usualmente tomaron prendas comunes para usarlas de maneras chocantes. La ropa era elegida y manipulada para enviar diferentes mensajes”, asegura Jill Condra en su libro ‘The Greenwood Encyclopedia of Clothing Through World History’.
El punk posteriormente influyó en el grunge y el movimiento emo, pero hay quienes creen que ha perdido su esencia original al dividirse en underground y comercial. Al convertirse en música del mainstream cuando géneros como el happy punk y el pop punk empezó a transmitirse en canales como MTV y firmar con disqueras como EMI.
Para finalizar esta columna de historia, les dejo la cuenta de @hecraetive para ilustrar el movimiento en la actualidad.
Instagram: @Caritovoodoo