Los 7 mandamientos del estilo personal

Por Lú Almaguer

Por definición, el estilo es el gusto, la elegancia o la distinción de una persona o cosa. Bueno, eso dice la RAE, sumando como ejemplo la frase: “Pepe viste con estilo”. Sin embargo, debemos admitir que en la práctica, “el estilo” es algo bastante subjetivo. Dicen por ahí que “es algo que se tiene o no se tiene”, pero a lo largo de los años he entendido que es algo propio e intransferible.  

Yo sé que ver a tantas chicas con armarios de ensueño en Instagram nos hace pensar, de vez en cuando, que eso es lo que se llama estilo. Pienso aquí en la master del color Nina Sandbech, en Jazmine Rogers, pero también en Rae Ann y Débora Rosa. Vamos, en ellas vemos estilismos que consideramos perfectos, que ejemplifican “el buen vestir”; pero si pensamos en cada una de ellas lo cierto es que en cada uno de los “lookzazos” que se marcan vemos como sus puntos de inspiración son de lo más variados. Y es justo ahí, donde entra “EL ESTILO”. 

El estilo no lo define ni el dinero que tenemos en la cuenta bancaria, ni la etiqueta que tenga la ropa que cuelga de nuestro armario. Tampoco está en cuanta ropa puedes comprar. El estilo va de conocerte, de saber decir esto me gusta y ya; el estilo simplemente es comprender tu presupuesto y utilizarlo de una manera en la que te haga ver única. Porque TU estilo es lo primero que ve la gente al conocerte, por lo tanto, lo prudente sería vernos 100% reflejadas en lo que llevamos. Ahora, no voy a mentir que este concepto puede parecer un poco daunting, pero la verdad, llegar a tu estilo personal y definirlo es más sencillo de lo que podría imaginarse. Y lo expondré en los 7 pasos que me ayudaron a encontrar mi propio estilo y a mantenerlo:

Ubica bien a tus musas y demás inspiración

Es decir, piensa en todos esos iconos que te inspiran, en el cine, en la música, en la moda y por supuesto en Instagram también. Aquí también entran épocas de la historia, colores, prendas en específico. Es más, un tip de expertas es crear un moodboard así tienes todo mucho más visual y más claro.

Revisa y ordena tu closet

Lo que más te pones hasta atrás -para no repetir tantas veces- lo que ya no usas a la pila de donaciones. Analiza a fondo lo que tienes y si algo no te inspira, ¿realmente lo necesitas dentro de tu guardarropa? 

Identifica lo que NO va contigo

Porque más de seguir una guía de reglas establecidas, “vestir bien” va un poco más del autoconocimiento y de saber en qué es en lo que verdaderamente nos sentimos cómodas.

Uniforme y signature look son sinónimos

Sé que escuchar la palabra uniforme nos regresa a la secundaria, pero lo cierto es que todas tenemos ESAS PRENDAS que hablan de ti y que siempre las llevas. En mi caso, yo solo vivo por tener la colección más grande de blazers. 

Compararse es el NO-NO más grande del mundo

Mira que no soy la fan más grande de Chanel, pero si hay algo en lo que siempre pienso es en aquella frase que dice así: “para ser irremplazable uno debe buscar ser diferente”. Y si, se que en la época de Instagram y TikTok hacerlo podría complicarse un poco, pero lo que debemos interiorizar es que tu estilo refleja cómo eres por dentro -y nadie más tiene la misma esencia que tu-.

Foto por Brayan Espitia en Unsplash

EX-PE-RI-MEN-TA

De verdad, no tengas miedo a salir de tu zona de confort. Que sí, que tener un buen número de básicos es esencial, pero nunca sabrás que un color se te ve bien si no te atreves. Amiga, go with the flow y encontrarás a tu mejor yo.

El “qué dirán” se puede ir…. muy lejos

Y es que como recientemente le dije a una amiga, en esta vida no hay que vestirse para nadie, ni por nadie, ni porque “nos sienta bien”; hay que vestirse para una, para gustarle al reflejo del espejo. De verdad, la mejor clave para tener (y mantener) ese estilo que te define es hacer de “a quién le importa” tu mantra personal.

Eso sí, lo más importante que debemos aprender es que el camino hacia el estilo personal no entiende de atajos pero el resultado final bien merece la pena.

IG: @marilu_ac