Los textiles inteligentes y la fibratrónica
Por Francelia Bahena
El mes pasado platicamos en esta bella columna sobre las telas antimicrobianas, una cosa muy interesante que descubrí investigando qué regalarle a una amiga que es médico. Este mes mis ganas de saber más sobre este tipo de textiles y si realmente son o no una alternativa coherente para la sustentabilidad me topé con un tema aún más extenso: los textiles inteligentes.
Según la Asociación Peruana de Técnicos Textiles, estos textiles son “tejidos que tienen componentes electrónicos incorporados. Estos componentes pueden incluir dispositivos como conductores, circuitos integrados, diodos emisores de luz, baterías y hasta pequeñas computadoras.”
El Departamento de Inteligencia de Mercados del SIICEX en Perú enlista cuatro propiedades que hacen inteligente a un textil:
Termo activos: Textiles que reaccionan al calor cambiando de color, conductividad o forma.
Fotoactivos: Textiles que por acción de la luz pueden cambiar de color o almacenar la energía para emitirla posteriormente.
Electro activas: Pueden variar su color, emitir luz, cambiar de forma o aumentar su temperatura con el paso de una corriente eléctrica a través de ellos.
Bioactivos: Fibras que poseen propiedades beneficiosas para la salud debido a la materia que las componen. Por ejemplo: fibras bioacidas, hidratantes, dermoprotectoras, aislantes, entre otros.
Las principales aplicaciones son para protección individual, para textiles médicos (claro que sí), en textiles técnicos en automoción y transporte público, en textiles para la industria arquitectónica y de la edificación y en la industria del vestido inteligente.
Estos textiles tienen los dispositivos electrónicos entretejidos de manera imperceptible, lo que les permite ser flexibles. Mientras que algunas formas de textiles inteligentes se utilizan para fabricar ropa, también se pueden usar para textiles destinados a diseño de interiores. Una faceta importante de la tecnología se encuentra en el campo de la fibratrónica, la cual estudia cómo lograr la integración completa de estos componentes electrónicos en las fibras textiles.
Cabe mencionar que se prevé que el mercado de e-Textiles (como también son conocidos) crecerá hasta alcanzar los 5 mil millones de dólares para el 2027 según información de la IDETechEx y el Departamento antes mencionado.
Hasta ahora, los ejemplos más destacados de estas prendas son en el ámbito de los deportes, donde marcas como Nike o Adidas llevan la batuta de este tipo de tecnología con ropa y calzado que tienen integrados microchips para monitorear los avances y desarrollo de sus atletas, equipos de la NBA y de la liga alemana de fútbol ya los están usando.
Por otro lado, Levis y Google se aliaron en el 2017 para elaborar una Chamarra que tuviera ciertas partes táctiles en ella desde donde la pudieras controlar como si se tratara de un celular, además podrías darle indicaciones con tu voz y activar Google Maps, por ejemplo.
Yo ya parece que patrocino Levis porque en cada nota que hago sobre avances tecnológicos siempre los menciono, pero ¿qué les digo? No es mi culpa que ellos anden invirtiendo cañón en investigación de textiles.
Y todo esto sí que tiene un trasfondo súper conectado con la sustentabilidad en la industria, pues una de las principales objetivos de estos textiles es que, como con las telas antimicrobianas) nunca más debas lavar y tu ropa y vivir en un futuro en donde, como si fuera película de Robots, cambiemos nuestra carcaza (ropa) cada que ya no nos quede más, disminuyendo radicalmente nuestro consumo… o no, eso ya será tarea de nosotros.
Fuentes:
https://www.siicex.gob.pe/siicex/documentosportal/167063308radC42B7.pdf