Cuando el K-pop y el K fashion invadieron el mundo de la moda
Por Gabriela Nava
No es ninguna novedad decir que la ropa y la música siempre han estado conectadas, lo vimos en el disco, el grunge, el punk y actualmente en el reggaeton. Solo tenemos que pensar en un artista famoso y podemos identificar rápidamente la icónica forma en la que se viste; personajes como Juan Gabriel, Harry Styles, Grimes, Bad Bunny, Karol G tienen un estilo único.
En 2011 las revistas apenas hablaban de eso, la industria de la moda y belleza coreana se comenzaban a posicionar en América con grupos como Big Bang, 2EN1, Girls Generation y SHINee. Fue el inicio de las BB Creams y las mascarillas de papel, y en la moda veíamos piezas como los tenis de plataforma. No fueron los mejores años para la moda, pero viendo lo que ha ocurrido casi 10 años después es interesante el cómo comenzó todo.
Hoy el skincare corenao está sumamente posicionado y contamos con empresas como Momiji que nacieron bajo este concepto. Por otra parte, la moda coreana influye fuertemente a las generaciones más jóvenes y tiene una gran presencia en redes sociales como TikTok.
Los famosos siempre han sido personas de gran alcance en sus seguidores. Viajamos entonces al 2011, mis amigas Directioners usaban sus playeras de rayas horizontales con pantalones entubados de colores, camisas de cuadros o chamarras bombers, todo porque de la misma manera se vestían los integrantes de One Direction. Mi hermana, quien es fan de Taylor Swift, moría por unos zapatos Oxford como los que ella usaba.
Hoy lo vemos de forma más prominente con grupos de K-Pop. El posicionamiento con celebridades es una de las estrategias de marketing más recurrentes, pensemos en Kim Kardashian y Balenciaga. Lo mismo ocurre con famosos de otras partes del mundo. En el 2021 los miembros del grupo de BTS fueron nombrados embajadores de Louis Vuitton y han estado presentes en los últimos desfiles de menswear de la marca de lujo. Lisa integrante de Black Pink también es embajadora de marcas de lujo como Bulgari y Celine.
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Siempre he pensado que Corea está muy por delante en cuanto a adoptar moda e incluso muchas de las tendencias favoritas de la Generación Z provienen del street style de Corea. Piezas como los tenis con plataforma chunky o en los wide leg jeans, los arneses o los tops con lindos fruncidos, las cadenas y las faldas tableadas, crearon una estética relajada, cómoda, cute y con mucha presencia que ahora vemos replicada en las grandes cadenas de fast fashion. Incluso Shein tiene la sección de Dazy donde únicamente encuentras ropa con la estética coreana.
En el 2011 mi mejor amiga se reunía con otras fans de One Direction donde también tenían un espacio para comercializar objetos o merch de la banda. Así podrían acercarse un poco más al estilo que querían lograr. Hoy la forma de conseguir piezas con esta estética es mucho más sencillo gracias a Instagram o a Facebook, donde las personas pueden abrir una cuenta y convertirla en una tienda virtual, algunas importan productos y marcas extranjeras, mientras que otros hacen sus propios productos. Páginas como Lunamo.mx son importantes ya que crean moda ética con estética coreana, siendo una alternativa accesible al fast fashion y promoviendo el consumo de productos nacionales.
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Aunque parece hasta chistoso el comparar qué nos influía ayer con el ahora, en realidad nos deja en claro que la moda está mucho más al alcance que antes, hemos visto cómo han evolucionado las estrategias de marketing e incluso la forma de vender. Prendas que antes eran difíciles de conseguir ahora están a tan solo un DM de distancia. Se ha democratizado la moda y hoy nos podemos preguntar ¿Cómo se viste una Army, una Bichota o una Motomami?
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