Mercedes Benz Fashion Week México ¿En reconstrucción?
Por Melissa Jáuregui
“Rehacer o volver a construir” es la definición de la Real Academia Española sobre el término reconstrucción. Una palabra que forma parte de mi diálogo interno que he mantenido desde que tuve la oportunidad de asistir a la edición de Mercedes Benz Fashion Week México en Guadalajara.
A través de las experiencias, los espacios exclusivos y las pasarelas que asistí durante los tres días que se presentó la plataforma, una cosa es cierta, “no todo lo que brilla es oro”. Con una trayectoria de más de 15 años, se ha fabricado una percepción y una idea de cómo las cosas funcionan dentro de Mercedes Benz Fashion Week México. Sin embargo, detrás de cada organización, de cada empresa, hay un sinfín de rostros, de cabezas, de manos y corazones que hacen lo mejor que pueden con lo que tienen.
Como espectadores ponemos atención a las propuestas de los diseñadores, las prendas y su ejecución, las inspiraciones y referencias de cada uno de ellos y cómo encajan en la visión de lo que la moda representa en México, poniendo en evidencia la falta de una mirada crítica a lo que sucede detrás de bambalinas. Para que las cosas sucedan tal y cómo las vemos a través de nuestras pantallas, hay muchísimas personas haciendo su trabajo, poniendo horas extra y un gran esfuerzo para que un evento de tal magnitud salga como está planeado.
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Fashion Week México no solo es de los diseñadores y de las caras que solemos relacionar con la plataforma año tras año, es también de los modelos, del personal, de los coordinadores, colaboradores, managers, maquilladores, fotógrafos, editores y todos los involucrados que hacen esto posible.
En conversación con distintas personas del equipo de Mercedes Benz Fashion Week México, se logra percibir una ola de cambio que rompe despacio pero que con cada impulso permea una sensación de esperanza y de ilusión de continuar celebrando la moda mexicana desde otras perspectivas.
“Fashion Week México es un gran reto. Para llegar a una edición hay un trabajo exhaustivo detrás, ideas, personas, formas de pensar, maneras de hacer las cosas con las que tienes que empatar y aprovechar para lograr el gran objetivo que es reconocer y poner bajo el reflector una porción del gran universo de talento en moda de nuestro país”, señala Mike Caro, director de Relaciones Públicas de Mercedes Benz Fashion Week México.
Tomando como base que la plataforma se enfoca en un consumidor en específico, como espectadores y público, no podemos pedir que la empresa le hable a la gran diversidad de mercados que existen en el país. En paralelo, si podemos exigir la apertura al diálogo, a los espacios, a la diversidad de voces, de representación en todas las áreas y la oportunidad de construir en conjunto una nueva industria de la moda en el país.
Emiliano Villalba, editor general de Mercedes Benz Fashion Week México, destaca en una honesta entrevista que realicé, sobre la importancia de la retroalimentación y de la crítica de la plataforma, ya que de lo contrario a lo que se pensaría, es vital para cada día mejorar sus prácticas.
“Mercedes Benz Fashion Week México es solo una parte de la gran diversidad de moda mexicana que hay en el país. El modelo y estructura de la plataforma responde a un mercado, a un nicho. Me gustaría que hubiera más plataformas para hablarle a otros mercados”, agrega Villalba.
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Desde otro punto de vista, desde backstage, es muy diferente presenciar cómo se vive y se desarrolla un evento que se ha posicionado por ser una de las voces de la moda mexicana más importantes, pero no la única.
Hace un par de años puse sobre la mesa el cuestionarnos para quién estaba dirigida la Mecedes Benz Fashion Week México, ¿para los espectadores que ven a través del lenta de una cámara?, ¿para los críticos y analistas de la moda?, ¿para qué sector de México? Con un panorama más amplio sobre estas cuestiones, la plataforma tiene muy en claro a qué mercado se dirige y está en libertad de hacerlo.
Sin embargo, conforme la industria de la moda en México continúa creciendo, quienes formamos parte de ella podemos demandar espacios con más apertura. Al final de cuentas, una plataforma de esta talla debe provocar conversaciones, reflexiones, cuestionamientos y sobre todo generar curiosidad en un ecosistema que cada vez se vuelve más grande.
Nuevas preguntas, curiosidades y necesidades para enriquecer lo que la moda mexicana es en todos sus contextos.
“He aprendido que todos los que trabajamos en esta industria tenemos una pasión por lo que hacemos. Lo que más me gusta es presenciarlo y reconocer el empeño que le ponemos a nuestro trabajo”, destaca Tessy Manzur, parte del equipo de Relaciones Públicas de la plataforma.
Uno de los factores clave que identifiqué cubriendo Mercedes Benz Fashion Week México fue la pasión. La pasión por la moda, por impulsar la creatividad en todas sus formas y crear conexiones positivas.
¿Qué somos sin las conexiones humanas? Solamente somos humanos y necesitamos conexiones reales entre tanta tecnología, espacios y personas. Conexiones genuinas a través del arte, de la moda y de la ropa.
Independientemente si estamos de acuerdo o no con las propuestas de moda y el mercado al que se dirige, Mercedes Benz Fashion Week México sigue siendo una de las voces más grandes de la moda en el país y el utilizar su plataforma para comenzar a abrir espacios a nuevo talento, diseño y medios es importante. Hay personas reales que han tomando su posición muy en serio para mover las piezas del ajedrez desde adentro y esto, se nota.
Con un largo camino por delante y muchos aspectos y elementos por transformar, uno de los primeros pasos para llegar a un cambio es el reconocimiento. La apertura al diálogo se está abriendo y es momento de preguntarnos, ¿qué queremos decir?
