¿Cuál es el futuro de la industria editorial de moda?
Por Melissa Jáuregui
La moda ya no espera en las páginas impresas; está disponible al instante, al momento, remodelando nuestra relación con la información de moda y cómo la percibimos.
Desde hace algunas décadas atrás, la industria editorial de moda experimenta una metamorfosis inevitable, impulsada por la revolución digital y el crecimiento de los recursos multimedia en tiempo real. En este nuevo panorama, la comunicación de moda se ha desvinculado de los ciclos tradicionales, abriendo un abanico de desafíos que están redefiniendo la forma en que interactuamos con la moda en la actualidad.
Específicamente hablando de los contenidos editoriales, antes, los reportajes de pasarelas, lanzamientos de colecciones y tendencias envejecían bien, permanecían inalterados por más tiempo. Hoy en día, un clic nos transporta instantáneamente a los desfiles de Londres o París a través de transmisiones en vivo y canales digitales, desdibujando las fronteras geográficas y temporales. La moda ya no espera en las páginas impresas; está disponible al instante, al momento, remodelando nuestra relación con la información de moda y cómo la percibimos.
Esta ola de cambio ha transformado la dinámica de la comunicación en la moda. Las versiones digitales de revistas de moda, independientes y con narrativas propias, ofrecen una experiencia completa y actualizada diariamente. La conexión directa que los consumidores tienen con las marcas de moda a través de sus plataformas digitales ha eclipsado el papel tradicional de las revistas impresas como intermediarios de información.
Como en distintas ocasiones lo hemos mencionado, esto plantea un enorme desafío para las revistas impresas, que continuamente tienen el riesgo de estar desactualizadas, y día con día, pierden relevancia en el ciclo acelerado de la moda actual. Lo que significa que ¿las editoriales de moda se convierten, entonces, en un objeto de colección más que en un medio informativo? ¿Puede competir con la inmediatez y la riqueza de información de las plataformas digitales?
Un ejemplo reciente en el panorama global es la transformación de la emblemática editorial británica i-D magazine, que recientemente fue adquirida por la empresaria Karlie Kloss, para evitar que cerraran operaciones. Sin embargo, hace unos días se anunció que la plataforma se daría una pausa operativa por tiempo indefinido mientras “repiensan qué significa la cultura hoy”, así como su editor en jefe desde 2019, Alastair McKimm dio a conocer su salida del medio de comunicación.
Inevitablemente nos hace cuestionarnos, ¿qué nos dejan a los medios independientes? Estos movimientos dominó en la moda solo reflejan la necesidad de adaptación y renovación de la industria editorial a nivel global.
Con esto, la figura del editor en jefe, antes venerada – amada y odiada gracias a Miranda Priestly-, también ha experimentado una gran evolución. La fluidez del contenido en redes sociales y la aparición de newsletters independientes señalan un cambio en la fuente de información y la forma en que se abordan las críticas y los análisis de moda, así como los reportes de tendencias y artículos de opinión que se solían consumir directamente en revistas impresas.
Con esto, los cambios en el modelo de negocio también son evidentes, con un énfasis creciente en la creación de contenido por las mismas marcas. ¿Para qué pagar publicidad cuando tengo el canal directo con mis consumidores por redes sociales? La publicidad que antes se destinaba a revistas ahora se dirige a esfuerzos de marketing internos y digitales, donde las marcas definen y controlan su voz y narrativa.
A pesar de esto, la demanda de contenido persiste, y las oportunidades para creadores de contenido, periodistas, escritores y fotógrafos continúan. Las revistas de moda, aunque continúan evolucionando en forma y formato, siguen siendo relevantes mientras se adaptan al nuevo horizonte. ¿Qué representa esta nueva realidad para las empresas y cómo liderar el camino?
La industria editorial y comunicación de moda está en un punto de inflexión emocionante, porque esto significa que está en construcción o quizás, en remodelación. La revolución digital ha desencadenado una transformación radical en la forma en que consumimos y compartimos información de moda y probablemente lo seguiremos viendo.
Aunque los retos son evidentes, las oportunidades para la innovación y la expresión creativa son igualmente abundantes. La clave radica en abrazar el cambio, explorar nuevas formas de comunicación y mantener la esencia única que hace que la moda sea una manifestación poderosa de la identidad en el contexto actual.
Por supuesto hay mucho que aprender, mejorar y visibilizar en este incierto camino de las editoriales de moda, pero creo que las comunidades, que cada vez se convierten en nichos específicos, tendrán mayor voz y voto en lo que quieren consumir y los medios y plataformas deben estar al día a estas necesidades que reflejan un entorno mucho más enriquecido de distintas voces y visiones en la industria de la moda.
Fuentes
Fernández, Chantal. (2024, 15 de febrero). “What’s Going on at i-D? The Cut. https://www.thecut.com/article/whats-going-on-at-karlie-klosss-i-d-magazine.html
Ilyashov, Alexandra. (2023, 1 de Agosto). “Where does Fashion Media go from here? Fashionista. https://fashionista.com/2023/08/fashion-media-future
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@melissajauregui
